Nuevo partido y nueva lesión en la plantilla de la Unión
Deportiva Las Palmas. En este caso fue Wakaso el que, después de quince minutos
de partido, tuvo que salir del terreno de juego lesionado. El diagnóstico,
microrrotura fibrilar en el bíceps femoral derecho, que le alejará, durante un
mes al menos, del campo. Pero ¿cuáles son los mecanismos que intervienen en una
lesión?
La medicina dice que los factores que intervienen en una
lesión deportiva son tres:
1)
El mismo deportista, que es el verdadero protagonista
2)
El equipamiento deportivo y el medio en el cual se desempeña
la práctica deportiva; y
3) La estructura y características específicas del deporte en
cuestión. No es lo mismo la natación que el fútbol, por ejemplo
Estos factores intervienen en mayor o menor proporción,
siendo muy complejos cada uno de ellos.
Se deben distinguir dos grandes tipos de lesiones:
- Lesiones
derivadas de traumatismos directos
que aparecen en deportes donde hay contactos frecuentes, como el rugby, el
fútbol o el baloncesto. El traumatismo es causado por un agente externo,
un rodillazo, un codazo, o el contacto con un objeto duro como el suelo.
Este tipo de traumatismos provocan sobre el músculo contusiones, cuya
gravedad depende de la intensidad del traumatismo y del estado funcional
del músculo en el momento del choque. En la práctica es difícil de
prevenir este tipo de lesiones directas, aunque se conoce el mecanismo.
- Lesiones
musculares originadas por traumatismo
indirecto: en este caso es el propio músculo el que produce el
traumatismo.
Entre las causas de estas últimas lesiones musculares se
encuentran:
- Trastornos
histoquímicos
- Metabólicos
- Genéticos
Pero a estas causas hay que añadirles otras que favorecen la
lesión, como son:
-
falta de entrenamiento
-
falta de estiramiento y calentamiento
-
sobreesfuerzo
-
focos infecciosos locales
-
y la falta de higiene deportiva
Este último factor engloba aspectos tan variados como vestuario y calzado inapropiado, alimentación, hidratación, sueño, problemas psicológicos, que es lo que la Medicina Deportiva
denomina Entrenamiento Invisible. El entrenamiento invisible es el entrenamiento que hace el
deportista fuera de las horas de trabajo físico, y que corresponde a los hábitos de su vida cotidiana, y que influyen en la práctica deportiva, y en la lesión. Hay jugadores que se entrenan para lesionarse.
El
Psicoanálisis Deportivo va más allá del Entrenamiento Invisible, y dice que en
toda lesión está implicado el sujeto psíquico. El sujeto interviene siempre en
el proceso de la lesión, en ocasiones en la etiología, otras en el proceso, y
otras, la más importante, en el pronóstico.
Y ¿qué es lo psíquico en el sujeto? Los afectos, las relaciones, la
personalidad, los celos, la envidia, conforman lo que denominamos psíquico en
el sujeto. Los afectos como la tristeza, la ira, la alegría, el odio, el amor,
deben canalizarse por vía psíquica, es decir, a través de las palabras. Cuando
esta canalización no se utiliza o se utiliza mal, se canaliza por la otra vía
posible, el cuerpo.
En todas las
lesiones deportivas ha habido algunos afectos interviniendo en el mecanismo de
la lesión. Esto ocurre siempre. Por esta razón, la misma lesión en un jugador o
en otro, tiene un tiempo de recuperación y curación diferente. El deportista,
también interviene en su proceso de curación.